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| Marte está acompañado por dos lunas con cráteres: una interior llamada Fobos y otra exterior llamada Deimos. Crédito: NASA/JPL-Caltech/Universidad de Arizona |
El papel de la misión Martian Moons eXploration (MMX) en la nueva era de la exploración de la vida marciana.
- La superficie de la luna marciana Fobos está cubierta de una gran variedad de material que fue excavado y expulsado a través de numerosos impactos de meteoritos en toda la superficie de Marte.
- El proyecto Mars Sample Return (MSR), dirigido por la NASA-ESA, devolverá una gran cantidad de material marciano recogido en el cráter Jezero, en el cuerpo principal de Marte. Por su parte, la misión Martian Moons eXploration (MMX), dirigida por JAXA, recogerá diverso material marciano de la luna marciana Fobos.
- La colaboración entre MSR y MMX mejorará la capacidad de investigar rastros de vida marciana desde múltiples perspectivas, y acelerará el inicio de la nueva era de exploración de Marte en la década de 2020.
¿Cómo se convirtió la Tierra en un mundo habitado? ¿Hay vida más allá de la Tierra? Son preguntas que todo el mundo se ha planteado alguna vez y que ahora se han convertido en uno de los principales objetivos de la exploración planetaria. "Sin embargo, es posible que la respuesta no se encuentre mirando sólo a la Tierra", afirma el Dr. HYODO Ryuki, International Top Young Fellow (ITYF) del Instituto de Ciencias Espaciales y Astronáuticas (ISAS) y primer autor de este estudio.
Aunque la superficie de Marte está hoy seca, se cree que hubo un océano en la superficie del planeta rojo hasta hace unos 3.500 millones de años. Por ello, las agencias espaciales de todo el mundo tienen la mirada puesta en Marte para realizar misiones en la década de 2020. "La idea estratégica es que, para encontrar rastros de vida más allá de la Tierra, debemos mirar primero a Marte, ya que el entorno allí fue una vez similar al de la Tierra", explica Hyodo.
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| Fobos fotografiado por HiRISE. Crédito: NASA/JPL-Caltech/Universidad de Arizona |
Ejecutado conjuntamente por la NASA y la ESA, el proyecto "Mars Sample Return (MSR)" prevé recoger una gran cantidad de muestras de suelo tomadas en el cráter Jezero y devolverlas a la Tierra. El rover de la NASA, que aterrizó de forma segura en Marte en febrero de 2020, es el encargado de recoger las muestras y almacenar el material en contenedores para su transporte. Los contenedores se recuperarán de la superficie de Marte mediante un sistema de recuperación previsto para un futuro lanzamiento, con el retorno a la Tierra previsto para 2031.
Se cree que el cráter Jezero fue la ubicación de un gran lago que existió hace miles de millones de años. Se han descubierto minerales, como arcillas, que sugieren la existencia de agua, lo que hace suponer que pueden quedar rastros de vida. Por ello, la NASA-ESA decidió escudriñar esta zona. Sin embargo, en el caso de cuerpos celestes como la Tierra y Marte, no se puede dar por sentado que el conocimiento de todo el planeta pueda basarse en una sola localización.
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| Ilustración esquemática del transporte de material marciano. Crédito: JAXA |
Esto ha dado lugar a nuevas expectativas sobre el material de la superficie de la luna marciana, Fobos. Las simulaciones por ordenador han revelado que la superficie de Fobos está cargada de material marciano excavado durante innumerables impactos de pequeños meteoritos que se han producido aleatoriamente sobre la superficie de Marte. "Lo más conveniente para la misión de eXploración de las lunas marcianas, que tendrá como objetivo Fobos para la devolución de muestras, es que la órbita cercana de la luna a Marte significa que el material marciano excavado puede llegar a Fobos sin que se produzca un fuerte evento de excavación por choque, que fundiría el material", explica Hyodo. "En otras palabras, los rastros de vida marciana y los biomarcadores podrían ser llevados a Fobos sin ser destruidos".
El lanzamiento de la misión MMX de JAXA está previsto para 2024 JFY. La nave MMX pretende aterrizar en Fobos y recoger un total de 10g o más de muestras de material de la superficie en al menos dos lugares diferentes. (En el caso de la misión Hayabusa2, el objetivo antes del lanzamiento era de 0,1g, por lo que el proyecto MMX pretende obtener una muestra 100 veces mayor).
Fuentes, créditos y referencias:
JAXA