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| La revisión, apoyada por el Instituto de Información Científica sobre el Café (ISIC), concluye que el café tiene un efecto estimulante en algunos procesos digestivos, y un posible efecto protector contra dolencias digestivas comunes, como los cálculos biliares, así como contra ciertas enfermedades hepáticas. |
Dado que el café se consume ampliamente en todo el mundo, es de vital importancia conocer sus efectos en los primeros órganos del cuerpo con los que entra en contacto durante su consumo, es decir, el tracto gastrointestinal. Sorprendentemente, las investigaciones dedicadas a este aspecto siguen siendo escasas. Una nueva revisión de estudios anteriores, publicada esta semana en la revista Nutrients, muestra que la ingesta de café estimula las secreciones gástricas, biliares y pancreáticas, lo que parece favorecer los primeros pasos del proceso digestivo.
"La influencia del café en los procesos digestivos se conoce desde hace mucho tiempo, y tomar café después de las comidas se ha convertido en un hábito para la mayoría de nosotros", dijo la autora del estudio, la Dra. Astrid Nehlig, investigadora del Instituto Nacional de Salud e Investigación Médica de Francia y consultora científica del Instituto de Información Científica sobre el Café.
"De hecho, se considera que el café favorece la digestión al actuar sobre la producción de ácido del estómago, sobre la secreción biliar y pancreática y sobre la motilidad del colon".
"En nuestra revisión, consideramos los efectos de la ingesta de café en los órganos que componen el tracto gastrointestinal, que son los primeros órganos con los que el café y su gran diversidad de componentes entran en contacto tras la ingesta".
En una revisión sistemática, el Dr. Nehlig analizó los datos de un total de 194 estudios sobre el consumo de café.
Los resultados sugieren que el consumo moderado de café (de 3 a 5 tazas al día) no genera efectos nocivos en los distintos órganos del tracto digestivo.
"Dos áreas de especial interés que se desprenden de la investigación son la asociación entre el café y un menor riesgo de cálculos biliares y las pruebas que relacionan el consumo de café con un menor riesgo de pancreatitis, aunque todavía se necesita más investigación", dijo el Dr. Nehlig.
"En su recorrido por el tracto gastrointestinal, el café tiene tres impactos principales", explicó.
"El café está asociado a las secreciones gástricas, biliares y pancreáticas, todas ellas necesarias para la digestión de los alimentos. Se ha descubierto que el café estimula la producción de la hormona digestiva gastrina y del ácido clorhídrico, presente en el jugo gástrico, que ayudan a descomponer los alimentos en el estómago. El café también estimula la secreción de colecistoquinina, una hormona que aumenta la producción de bilis, también implicada en la digestión."
"El café parece estar asociado a cambios en la composición de la microbiota intestinal. En los estudios revisados, se encontró que el consumo de café induce cambios en la composición de la microbiota intestinal, principalmente a nivel de la población de Bifidobacterias, un habitante ubicuo del tracto gastrointestinal."
"El café se asocia a la motilidad del colon, es decir, al proceso por el que los alimentos se desplazan por el tracto digestivo. Los datos sugieren que el café puede estimular la motilidad del colon tanto como los cereales, un 23% más que el café descafeinado o un 60% más que un vaso de agua1 y puede estar relacionado con un menor riesgo de estreñimiento crónico."
Las últimas investigaciones también apoyan firmemente el efecto protector del café contra las enfermedades hepáticas, incluido el carcinoma hepatocelular, uno de los tipos más comunes de cáncer de hígado.
A pesar de las pruebas que sugieren que el consumo de café puede ayudar en las primeras etapas de la digestión, la mayoría de los datos no respaldan la conclusión de que el café tenga un efecto directo sobre el reflujo gastroesofágico. En su lugar, se trata de un efecto combinado o aditivo de otros factores de riesgo, como la obesidad y una dieta inadecuada.
"En contra de algunas suposiciones, el consumo de café no está vinculado en general a los problemas intestinales o digestivos", dijo el Dr. Nehlig.
"En algunos casos, el café tiene un efecto protector contra dolencias digestivas comunes como el estreñimiento".
"Los datos emergentes también indican que puede haber una asociación con la mejora de los niveles de grupos de bacterias intestinales, como las Bifidobacterias, que tienen efectos beneficiosos reconocidos".
"Aunque se necesitarán datos adicionales para comprender los efectos del café en todo el tracto digestivo, este es un punto de partida muy alentador."
Fuentes, créditos y referencias:
Astrid Nehlig et al. 2022. Effects of Coffee on the Gastro-Intestinal Tract: A Narrative Review and Literature Update. Nutrients 14 (2): 399; doi: 10.3390/nu14020399