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| Investigadores encuentran nuevas pistas en el cerebro que relacionan el dolor y la comida |
Existe la creencia generalizada de que hay una asociación entre la comida y el dolor. Las personas con dolor crónico a menudo luchan con su peso. Todavía no se sabe cómo afecta el dolor crónico a la conducta alimentaria y al peso corporal.
Científicos del Instituto de Neurociencia Del Monte han explicado que los circuitos cerebrales responsables de la motivación y el placer se ven afectados cuando alguien experimenta dolor.
Los científicos observaron las respuestas cerebrales al azúcar y la grasa, utilizando un postre de gelatina y un pudín. Posteriormente, alteraron el azúcar, la grasa y la textura de los alimentos.
Descubrieron que ningún paciente experimentaba cambios en su conducta alimentaria con el azúcar, pero sí con la grasa. Los que padecían un dolor lumbar agudo que luego se recuperó eran los más propensos a perder el placer de comer el pudín y a mostrar señales de saciedad alteradas. Por otro lado, los pacientes con lumbalgia aguda cuyo dolor persistía al año no cambiaron inicialmente su conducta alimentaria.
Los pacientes con dolor lumbar crónico señalaron que, con el tiempo, los alimentos ricos en grasas y carbohidratos, como los helados y las galletas, se convirtieron en un problema para ellos. Sus escáneres cerebrales también mostraban señales de saciedad alteradas.
Cuando los científicos realizaron un escáner cerebral, descubrieron que el núcleo accumbens -una pequeña zona del cerebro conocida sobre todo por su papel en la toma de decisiones- ofrece pistas sobre quiénes corren el riesgo de experimentar un cambio a largo plazo en su conducta alimentaria.
En los pacientes que inicialmente experimentaron cambios en su conducta alimentaria pero cuyo dolor no se hizo crónico, la estructura de su núcleo accumbens parece normal. Pero en los pacientes cuyo dolor se hizo crónico, su núcleo accumbens parece más pequeño.
Curiosamente, el núcleo accumbens predijo las puntuaciones de placer sólo en los pacientes con dolor de espalda crónico y en los pacientes que se volvieron crónicos después de un ataque agudo de dolor de espalda. Esto sugiere que esta región se vuelve crítica en el comportamiento motivado de los pacientes con dolor crónico.
Un núcleo accumbens más pequeño significa un mayor riesgo de desarrollar dolor crónico.
Fuentes, créditos y referencias:
Yezhe Lin, Ivan De Araujo, Gelsina Stanley, Dana Small, Paul Geha. Chronic pain precedes disrupted eating behavior in low-back pain patients. PLOS ONE, 2022; 17 (2): e0263527 DOI: 10.1371/journal.pone.0263527