Un agujero en un Triceratops llamado "Big John" probablemente vino de un combate

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La herida punzante encontrada en el volante del cuello de Big John. (Ferrara A., y Briano I.)
La herida punzante encontrada en el volante del cuello de Big John. (Ferrara A., y Briano I.)

Los restos fósiles del espécimen de triceratops conocido como "Big John" muestran lesiones en el cráneo que podrían haberse producido durante un combate con otro triceratops, según una nueva investigación publicada en Scientific Reports.

El triceratops (Triceratops horridus) es una especie de dinosaurio con cuernos que se caracteriza por su gran volante en el cuello, formado por los huesos del cráneo del patito y del escamoso. Se ha sugerido que este volante óseo servía de protección contra las heridas de otros triceratops durante las peleas.

Ruggero D'Anastasio y sus colegas examinaron el espécimen de triceratops conocido como "Big John", llamado así por su gran tamaño, que fue descubierto en 2014 en la Formación Hell Creek del Cretácico Superior, en Montana, Estados Unidos. Informan de la presencia de una abertura en forma de ojo de cerradura (una fenestra) en el hueso escamoso derecho. La superficie del hueso que rodea la fenestra es irregular y presenta depósitos de hueso en forma de placa, que podrían haber sido el resultado de una inflamación (posiblemente de una infección).

El Triceratops horridus Big John. (a) El esqueleto completo restaurado; la fenestra analizada aquí está indicada por el círculo blanco (cortesía de Ferrara A., y Briano I.). (b) Detalle del cráneo (cortesía de Ferrara A., y Briano I.). (c) Detalle de la fenestra: en la superficie ósea que rodea la lesión se aprecian depósitos en forma de placa de hueso reactivo (flechas blancas) y lesiones líticas (flechas negras). En el margen inferior se ve la región donde se tomó la muestra a analizar. Crédito: Scientific Reports (2022). DOI: 10.1038/s41598-022-08033-2
El Triceratops horridus Big John. (a) El esqueleto completo restaurado; la fenestra analizada aquí está indicada por el círculo blanco (cortesía de Ferrara A., y Briano I.). (b) Detalle del cráneo (cortesía de Ferrara A., y Briano I.). (c) Detalle de la fenestra: en la superficie ósea que rodea la lesión se aprecian depósitos en forma de placa de hueso reactivo (flechas blancas) y lesiones líticas (flechas negras). En el margen inferior se ve la región donde se tomó la muestra a analizar. Crédito: Scientific Reports (2022). DOI: 10.1038/s41598-022-08033-2


Los autores analizaron muestras tomadas del margen mayor de la fenestra, que revelan que el tejido óseo alrededor de la fenestra es poroso y con muchos vasos sanguíneos en comparación con el tejido óseo más alejado de la fenestra, lo que sugiere que se trata de un hueso recién formado. El hueso también mostraba signos de remodelación, como demuestra la presencia de pequeñas fosas conocidas como lagunas de Howship.

En conjunto, estas características indican que la fenestra fue causada por una lesión traumática, pero que el hueso se estaba curando en el momento de la muerte de Big John. Los autores sugieren que la lesión fue causada por el cuerno de otro triceratops, y que ocurrió al menos seis meses antes de la muerte de Big John. Según estos resultados, los mecanismos que subyacen al proceso de curación en los dinosaurios parecen ser similares a los de los mamíferos.

Fuentes, créditos y referencias:

Ruggero D'Anastasio, Histological and chemical diagnosis of a combat lesion in Triceratops, Scientific Reports (2022). DOI: 10.1038/s41598-022-08033-2. www.nature.com/articles/s41598-022-08033-2

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