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Detalle del panel de la escena de una figura masculina flanqueada por dos leopardos. Crédito: K. Akdemir
Una escultura mural de 11.000 años de antigüedad descubierta en Turquía tiene muchas posibilidades de ser la escena narrativa más antigua que se ha encontrado hasta la fecha, según una nueva investigación, aunque no es algo que usted quiera contemplar mientras trabaja o cuando hay niños presentes.
El descubrimiento, del que informa el Dr. Özdoğan en la revista Antiquity, se produjo durante las excavaciones en Sayburç que comenzaron en 2021. El yacimiento se encuentra bajo un pueblo moderno en la provincia de Şanlıurfa.
El banco tiene dos escenas talladas que muestran a personas interactuando con animales. En una escena hay un hombre agarrando su falo con leopardos a ambos lados. La segunda escena muestra a un hombre en cuclillas haciendo sonar un cascabel a un toro.
"Estas figuras, grabadas juntas para representar una narración, son los primeros ejemplos conocidos de una escena holística de este tipo", afirma el arqueólogo Dr. Eylem Özdoğan, de la Universidad de Estambul. "Era una imagen de las historias que formaban la ideología de la gente de aquel periodo".
El yacimiento de Sayburç estuvo habitado durante el Neolítico, en el IX milenio a.C., un periodo en el que se pasó de un estilo de vida móvil de cazadores-recolectores a la agricultura y la vida en asentamientos de larga duración.
El relieve de Sayburç. Crédito: B. Kösķer
Las excavaciones también han sacado a la luz varios edificios residenciales, así como una gran estructura comunal bordeada de bancos de piedra a lo largo de las paredes, que puede haber servido como punto focal para reuniones o actividades rituales. Los investigadores creen que las escenas narrativas de los bancos pueden representar personajes históricos o figuras míticas que formaban parte esencial de las tradiciones de la comunidad.
"Este edificio presenta todos los rasgos característicos de las estructuras comunales de la región. En esta estructura, como en otras similares, se encontraron imágenes de animales y humanos. Sin embargo, aquí las figuras características de la época coexisten y forman una escena", dijo el Dr. Özdoğan.
"Los testimonios arqueológicos pueden aportar alguna información sobre las tradiciones de las sociedades del pasado, pero rara vez sobreviven pruebas más claras, por lo que este descubrimiento es emocionante", afirmó el Dr. Özdoğan. "Sayburç presenta pruebas muy claras en este sentido y tiene el potencial de decirnos mucho sobre el Neolítico".
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