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Impresión artística de Ceratosuchops y la orientación del endomolde en el cráneo. Crédito: Anthony Hutchings |
Spinosauridae es un clado aberrante de dinosaurios terópodos de hocico largo y cuerpo grande con taxones representativos y especímenes clave de los registros fósiles de Europa, Asia, África y Sudamérica. Tenían mandíbulas largas, parecidas a las de los cocodrilos, y dientes cónicos.
Estas adaptaciones les ayudaban a llevar un estilo de vida algo acuático que consistía en acechar las orillas de los ríos en busca de presas, entre las que se encontraban grandes peces. Este modo de vida era muy diferente del de terópodos más familiares, como el Allosaurus y el Tyrannosaurus.
Para comprender mejor la evolución del cerebro y los sentidos de los espinosaurios, científicos de la Universidad de Southampton y la Universidad de Ohio han reconstruido el cerebro y el oído interno de dos espinosaurios británicos. Para ello, escanearon los fósiles de Baryonyx, de Surrey, y Ceratosuchops, de la isla de Wight.
Estos dos son los primeros espinosaurios de los que se conoce material del cerebro. Hace 125 millones de años, estas enormes bestias se paseaban por la Tierra. Los cerebros de ambos especímenes están en buen estado, y los científicos utilizaron la reconstrucción digital para recrear los tejidos blandos del interior que hacía tiempo que se habían descompuesto.
Según los expertos, los bulbos olfativos, que procesan los olores, no estaban bien desarrollados y el oído probablemente estaba sintonizado con sonidos de baja frecuencia. Las regiones cerebrales responsables de mantener el equilibrio y la mirada fija en la presa pueden haber estado menos desarrolladas que en los espinosaurios posteriores, más especializados.
El estudiante de doctorado de la Universidad de Southampton Chris Barker, que dirigió el estudio, declaró: "A pesar de su inusual ecología, parece que los cerebros y sentidos de estos primeros espinosaurios conservaron muchos aspectos en común con otros terópodos de gran cuerpo: no hay pruebas de que sus estilos de vida semiacuáticos se reflejen en la forma en que están organizados sus cerebros."
"Una interpretación de esta evidencia es que los terópodos antepasados de los espinosaurios ya poseían cerebros y adaptaciones sensoriales adecuadas para la captura de peces a tiempo parcial y que 'todo' lo que los espinosaurios necesitaban hacer para especializarse para una existencia semiacuática era evolucionar un hocico y dientes inusuales."
El Dr. Darren Naish, autor colaborador, dijo: "Dado que los cráneos de todos los espinosaurios están tan especializados para la captura de peces, es sorprendente ver cerebros tan 'no especializados'. Pero los resultados siguen siendo significativos. Es emocionante obtener tanta información sobre las capacidades sensoriales -oído, olfato, equilibrio, etc.- de los dinosaurios británicos. Utilizando tecnología punta, hemos obtenido toda la información posible relacionada con el cerebro de estos fósiles".
El coautor Lawrence M. Witmer, catedrático de Anatomía de la Facultad de Medicina Osteopática Heritage de la Universidad de Ohio, declaró: "Esta nueva investigación es sólo la última de lo que equivale a una revolución en paleontología gracias a los avances en la obtención de imágenes de fósiles mediante tomografía computarizada. Ahora estamos en condiciones de poder evaluar las capacidades cognitivas y sensoriales de animales extinguidos y explorar cómo evolucionó el cerebro en dinosaurios de comportamiento extremo como los espinosaurios."
El Dr. Neil Gostling, que dirige el EvoPalaeoLab de la Universidad de Southampton, declaró: "Este nuevo estudio pone de relieve el importante papel que desempeñan los fósiles británicos en nuestra comprensión de los dinosaurios, que evoluciona constantemente y a gran velocidad, y muestra cómo el Reino Unido -y la Universidad de Southampton en particular- está a la vanguardia de la investigación sobre los espinosaurios. Los propios espinosaurios son uno de los grupos de dinosaurios más controvertidos, y este estudio constituye una valiosa aportación a los debates en curso sobre su biología y evolución."
Fuentes, créditos y referencias: