Vea También
Marte, a menudo considerado el primo planetario más cercano a la Tierra, es un mundo de condiciones extremas. Con su fina atmósfera, sus bajas temperaturas y sus tormentas de polvo, presenta un entorno muy diferente al de la Tierra. Uno de los aspectos más intrigantes del clima marciano es la velocidad del viento, que durante mucho tiempo se creyó relativamente moderada. Sin embargo, una nueva investigación basada en los vuelos del helicóptero Ingenuity de la NASA ha revelado datos sorprendentes que cuestionan los modelos atmosféricos anteriores.
La atmósfera de Marte está compuesta principalmente por dióxido de carbono y es unas 100 veces más fina que la de la Tierra. Esto significa que, aunque el viento existe en el Planeta Rojo, no tiene la misma fuerza que en la Tierra. A pesar de ello, las tormentas de polvo a gran escala pueden envolver el planeta, oscureciendo su superficie y alterando la dinámica atmosférica.
Las temperaturas en Marte fluctúan significativamente, con una media de -60°C, pero alcanzando ocasionalmente los 20°C cerca del ecuador durante el verano. Esta gran variación de temperatura influye en los patrones de los vientos, convirtiéndolos en un factor clave para comprender el clima marciano.
Una de las críticas a la película de 2015 The Martian fue su descripción de los potentes vientos en Marte. Dada la delgada atmósfera del planeta, se pensaba que los vientos de alta velocidad tendrían un impacto mínimo en comparación con los de la Tierra. Modelos anteriores sugerían que los vientos marcianos no superarían los 15 m/s. Sin embargo, el helicóptero Ingenuity de la NASA, durante su histórica misión de 72 vuelos, registró vientos de hasta 25 m/s, demostrando que las estimaciones anteriores eran inexactas.
El Ingenuity se diseñó inicialmente como una demostración tecnológica, pero rápidamente se convirtió en una herramienta esencial para la investigación atmosférica. En lugar de llevar sensores de viento específicos, los investigadores utilizaron un método innovador: medir la inclinación del helicóptero mientras planeaba.
Los drones, incluido el Ingenuity, mantienen su posición ajustando su ángulo de inclinación en respuesta a fuerzas externas como el viento. Analizando la inclinación necesaria para contrarrestar la deriva, los científicos pudieron determinar la velocidad del viento a diferentes altitudes, de entre 3 y 24 metros.
Los datos recogidos por Ingenuity revelaron que los vientos marcianos son significativamente más fuertes de lo esperado, alcanzando hasta 25 m/s. Este nuevo dato proporciona información crucial para futuras misiones, en particular las que incluyan vehículos aéreos. Las mediciones anteriores de la velocidad del viento se basaban en sondas terrestres o en datos recogidos durante el descenso atmosférico, pero los vuelos sostenidos de Ingenuity permitieron un análisis más detallado a distintas altitudes.
El éxito de las mediciones de velocidad del viento de Ingenuity tiene implicaciones directas para las próximas misiones de exploración planetaria. Una de ellas es Dragonfly, un helicóptero de la NASA que explorará Titán, la luna más grande de Saturno. Los científicos esperan aplicar las mismas técnicas de medición para comprender mejor la densa y dinámica atmósfera de Titán.